¿No andas sobrado de espacio en tu establecimiento? En ese caso, necesitas saber cómo organizar un restaurante pequeño para sacarle el máximo partido posible. Permítenos ayudarte en tu lucha por exprimir cada centímetro de tu local. ¡Empezamos!
Ya sea para comprar o alquilar un establecimiento, el precio del metro cuadrado está por las nubes. Por eso, muchos hosteleros tienen que apañarse con establecimientos realmente pequeños para desarrollar nuestra actividad. No te vamos a engañar: organizarlos y gestionarlos representa todo un reto, pero no hay nada que el ingenio no pueda resolver.
Cómo organizar un restaurante pequeño
Cuando nos planteamos cómo organizar un restaurante pequeño, la planificación es nuestra mejor aliada. Así pues, la estrategia que llevemos a cabo deberá procurar un óptimo aprovechamiento del lugar, haciendo que podamos trabajar cómodamente en él.
Cómo organizar un restaurante pequeño según la “marcha hacia adelante”
Lo primero que tienes que hacer es dividir el restaurante en áreas de trabajo perfectamente delimitadas. De este modo, podrás desarrollar tu actividad de forma fluida, ágil y eficiente.
La lógica y la seguridad alimentaria hacen que el principio de “marcha hacia adelante” sea una elección ganadora a la hora de diseñar las áreas del restaurante. Al fin y al cabo, no solo te ayudará a economizar el espacio, sino que también evitará desplazamientos innecesarios por parte del staff.
Este principio implica zonificar el restaurante siguiendo el orden de: recepción, almacenamiento, preparación y envasado/emplatado, estableciendo una secuencia de trabajo lineal. Con ello se sigue una progresión desde las áreas “sucias” hacia las zonas “limpias” que impide la contaminación cruzada.
El arte de realizar una distribución inteligente
El siguiente paso es disponer el mobiliario y los utensilios de trabajo de tal manera que no entorpezcan ni al personal ni a los clientes. Por supuesto, cuando se trata de establecimientos pequeños, mantenerlo todo bien ordenado es una prioridad irrenunciable.
- En el comedor: los muebles modulares y apilables te serán de gran ayuda para mantener el local ordenado. En este punto, las mesas cuadradas son preferibles a las redondas.
- En la barra: su ubicación y forma es determinante para economizar el espacio de tu establecimiento. Asegúrate de que nada en ella (por ejemplo, grifo de cerveza) dificulte el paso de los trabajadores.
- En la cocina: coloca la maquinaria de forma estratégica y procura tener suficiente área de almacenamiento con el fin de evitar la acumulación de objetos en la superficie de trabajo.
Nunca tengas más personal del necesario
Buena parte de cómo organizar un restaurante pequeño está relacionada con el número de empleados que trabajan en él. Ciertamente, tener demasiados trabajadores, lejos de facilitar sus funciones, acabará por complicarlas al tener que compartir un espacio reducido.
No nos entiendas mal: no te estamos pidiendo que explotes a tus trabajadores: ayúdales a desempeñar su labor con mayor eficiencia. A tal fin, la digitalización de tu local constituye una muy buena opción.
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Claves para gestionar el restaurante pequeño
Cuantas menos idas y venidas, mejor
Cuando la amplitud no abunda, hay que reducir sí o sí los desplazamientos de los camareros. Eso es, precisamente, lo que obtienes cuando implementas un sistema de pedido y pago desde la mesa con código QR. ¡Imagina todos los viajes que le ahorrará a tus empleados!
Define cuidadosamente los roles del personal
El orden amplía tu local y el caos lo reduce. Por lo tanto, si te planteas cómo organizar un restaurante pequeño de manera eficaz, necesitarás dejar claro a cada empleado cuál es su función. Además, cuanto más especializado y digitalizado esté, mayor será su rapidez.
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Por razones obvias, los servicios de delivery y take-away son una excelente fuente de ingresos para locales de reducidas dimensiones. ¡Haz que sean aún más rentables ofreciéndolos desde tu propia plataforma de pedidos online!
Apuesta por un comedor minimalista
Detalle a detalle, el interiorismo es decisivo para ampliar las posibilidades del comedor, al tiempo que crea una atmósfera confortable para los clientes. Aquí tienes algunos ejemplos de ello:
- Pinta las paredes de blanco o de colores suaves.
- Favorece la entrada de luz natural. Los apliques y las lámparas de techo también son una buena forma de iluminar sin ocupar espacio.
- Utilizar cartas digitales con código QR en lugar de menús en papel es un truco muy útil para aprovechar la superficie de las mesas.
- Colocar grandes espejos en las paredes es todo un clásico cuando se trata de ampliar visualmente la estancia.
Una vez aclarado cómo organizar un restaurante pequeño, salta a la vista que el uso de la tecnología juega siempre a nuestro favor. Así lo demuestran utilidades como las cartas digitales, los pedidos y pagos desde la mesa con QR o los pedidos online. Benefíciate de todas ellas con el SaaS que hemos diseñado en ReadyMe y empieza a optimizar el espacio de tu local.